‘El Aviso’ recuerda a un capítulo poco memorable de una serie de televisión, donde a pesar de que las piezas encajan, ni degustamos su montaje ni disfrutamos su resultado.
Hace dos años el cine español nos dio una verdadera lección de talento con un par de thrillers sensacionales . ‘Que Dios nos perdone‘ y ‘Tarde para la ira’ fueron dos pequeñas joyas que derrochaban talento en cada uno de sus planos, una consecuencia directa de ‘La isla mínima‘ que les abrió el camino de la crítica y el público, y mostró de lo que podíamos ser capaces en España. Sin embargo 2017 fue una año mucho más pobre con ‘El Guardían invisible‘ y ‘La niebla y la doncella‘ estropeando la buena racha. Este 2018 un nuevo thriller llegaba a la gran pantalla, y además el casting daba muy buena espina, con Raúl Arévalo, Aura Garrido y Belén Cuesta a la cabeza. Deseábamos que la balanza se posicionara a favor de nuestro cine, pero viendo el resultado, El Aviso no solo continúa el mal camino, sino que lo acelera hacia el desastre.

Tras el disparo que recibe su mejor amigo en una gasolinera de Madrid, Jon (Raúl Arévalo) descubre que en ese mismo lugar, 32 años atrás, hubo un suceso muy parecido. Desde ese momento comienza a obsesionarse y a relacionar una serie de tiroteos con secuencias numéricas que se repiten siguiendo unos patrones establecidos en ese mismo establecimiento. En otra linea temporal, diez años después del suceso, un niño de casi diez años recibe una nota avisándole de que no aparezca por la gasolinera el día de su cumpleaños.
Estamos ante una idea asequible vendida de forma compleja, que utiliza secuencias numéricas para atrapar a un espectador fácilmente impresionable. Podríamos aceptar que las sumas y restas que conforman el misterio, fueran una excusa para profundizar en los dramas personales de los personajes. Que su interés real no residiera en unas cuentas que hasta un niño de primaria podría resolver con gran facilidad, sino que fueran los personajes el enigma a resolver. Pero ni eso consigue, con la esquizofrenia, el bullying, la culpabilidad o el maltrato apareciendo como accesorios que desentonan en el conjunto final.

Una dirección confusa, un guion mal planteado, personajes descritos a medias, una carga dramática errónea y actores mal dirigidos. El resultado es la suma de muchos errores que desmerecen cualquier intento de hacer algo diferente. Además da la sensación de que la historia sigue su propio ritmo, sin esperar al espectador, con dos lineas temporales que se entrelazan con gran torpeza.
‘El Aviso’ recuerda a un capítulo poco memorable de una serie de televisión, donde efectivamente las piezas encajas, pero ni degustamos su montaje ni disfrutamos de su resultado. Una oportunidad desaprovechada para realzar el thriller patrio, que nos obliga a avisaros de un desastre anunciado.