Tras una primer temporada sorprendente, Killing Eve no ha decepcionado con su regreso. De hecho ha conseguido estrechar la relación de Eve y Villanelle haciéndolas incluso trabajar codo con codo, y eso que nunca es sencillo cuando tiene al lado a la asesina más letal de Los Doce.
Eve ha visto como su matrimonio quedaba dañado por esa obsesión por Villanelle. Y a la vez la joven asesina ha ido cambiando de manos dejándose guiar por Konstantin, del que no nos fiamos ni nosotros mismos. Porque en una temporada donde las distancias entre buenos y malos se han difuminado, hasta el punto de trabajar juntos para un plan mayor, ya no sabemos de quién podemos fiarnos.
EL MI6, ¿LOS BUENOS?
La temporada ha girado en torno a Aaron Peel, el hijo de un multimillonario de la informática que mandó matar a su padre para hacerse con el control de la empresa y así poder comercializar la información que obtiene de sus clientes. Además resultó ser un auténtico psicópata y maniático del control, teniendo su pequeño hobby asesinando mujeres en sus ratos de ocio. Un auténtico primor de hombre.
El MI6 quiere acabar con él para que no sea una amenaza en terreno de espionaje, ya que ha demostrado sacar información mucho más valiosa de lo que consigue la agencia de seguridad y venderla al mejor postor. Lo que es una amenaza a muchas escalas. Por eso dejan que Villanelle haga su trabajo sabiendo que la chicha no puede resistirse a rebanar el cuello por simple diversión y eso es precisamente lo que hace con Aaron Peel. Aunque a Eve todo le pilla por sorpresa, y se da cuenta de que solo es un títere de un plan mucho más maquiavélico pelando por su jefa Carolyn Martens.
¿HA MATADO VILLANELLE A EVE?
Pero vayamos al final. A la última escena. Al último encuentro entre Eve y Villeneulle y todo lo que eso conlleva. Porque si la primera temporada acababa con Eve apuñalando a Villanelle. Esta segundas termina con Villanelle disparando a Eve. Pero ¿intentaba matarla realmente?
Si algo hemos aprendido de Villanelle es que si quiere matar, mata. Es una asesina letal al que nadie se le escapa. Por eso ni Eve está verdaderamente muerta ni Villanelle quiere realmente matarla. Es verdad que la agente le ha defraudado, porque cuando pensaba que ellas eran iguales (incluso le ha hecho cometer su primer crimen para demostrarlo), Eve no ha reaccionado según esperaba. Sino que ha quedado traumatizada y le ha dejado tirada en vez de huir con ella en su fuga romántica. Villanelle decepcionada le disipara.
Pero igual que con la puñalada de Eve, Villanelle aseguró que eso significaba que en verdad le importaba (sí, así piensa Villanelle), ella hace lo mismo disparándola, demostrando así que Eve le importa. Seguramente crea que el disparo la espabile, que la haga aceptarse y darse cuenta de que son iguales. Pero, ¿realmente lo son?
Esa es la verdadera duda y ahí reside el misterio. Parece que no, parece que Eve es más una admiradora que una ejecutora, que le atrae el peligro y le atrae Villanelle pero ella no tiene la sangre fría para matar sin escrúpulos. Aunque esa duda quedará para la siguiente temporada donde las cosas pueden volverse muy locas.
